Dirigentes de la Asociación Bancaria de Tucumán anticiparon que llevarán adelante medidas de fuerza la próxima semana en una entidad bancaria de este provincia.
El referente nacional del gremio, el diputado nacional Carlos Cisneros, y la secretaria general de los bancarios en Tucumán, Cecilia Sánchez Blas, confirmaron la decisión de llevar adelante un paro en todas las sucursales locales del Banco Santiago del Estero (BSE).
"La medida es contra el despido de trabajadores con problemas de salud", indicaron los dirigentes sindicales. Además, entre las exigencias figuran cambios en la gerencia regional de la entidad, detallaron.
“Estamos cansados de los atropellos. Esta no es una provincia en la que se puedan violar las leyes laborales vigentes", afirmaron a LA GACETA.
Además, advirtieron que harán las gestiones correspondientes para que los jubilados no se vean afectados por la medida de fuerza, y puedan percibir sus haberes en otras entidades bancarias.
Por su parte, esta noche las autoridades del BSE explicaron que "el viernes 11 de marzo se dispuso el despido del ex empleado por pérdida de confianza fundada en su conducta, en razón de la ocurrencia de un hecho muy grave (art. 242 LCT)". "Se comprobó que el trabajador, quien se desempeñaba como cajero en la caja Nro. 1 de la Suc. Tucumán del BSE, incurrió en inconductas en su desempeño el día 14/2/2022, al haberse apropiado de la suma de $ 20.000 que integraban el haber de una jubilada", agregaron.
"Luego de pagar el importe de su haber previsional por la suma de $28.200, en dos fajos, contempló el retiro de la ventanilla de ésta, quien guardó sólo $8.200, dejando los restantes $20.000 sobre la caja. En ese momento, y sin hacer nada para detener a la cliente, tal como se ve en las imágenes televisivas del CCTV existente en el salón, el ex empleado tomó el fajo de $20.000 y lo disimuló debajo del teclado de su caja, donde lo ocultó hasta que finalmente lo colocó entre sus ropas", detallaron.
Por último, indicaron que "este acto intencional no tenía ninguna justificación, lo que se corrobora al no haber el empleado declarado tal suma como sobrante al cierre de la caja". "La desvinculación está además debidamente respaldada en las actuaciones de la auditoría interna, la cual corroboró con el examen de la documentación bancaria de la caja de ese día, que la misma se cerró sin contabilizar el importe de $20.000 como sobrante", sentenciaron.